El Real Madrid no hará fichajes en enero, y tampoco contempla la salida de ninguno de los jugadores de la actual plantilla. El club mantendrá el bloque con el que comenzó la temporada entre otras razones porque Zidane no ha pedido refuerzos. El entrenador francés tiene en mente sacar el máximo partido a los jugadores de los que dispone. Todos los esfuerzos del Madrid en materia de fichajes se dejarán para la próxima temporada, siempre y cuando el coronavirus remita y se pueda volver al nivel de ingresos previo a la pandemia. En ese escenario el objetivo no ha cambiado: Mbappé.

En Concha Espina tampoco esperan salidas. Marcelo y Jovic, dos jugadores con los que Zidane parece que cuenta menos, no tendrán permiso para salir en enero. En el club saben que el entrenador hará por recuperarles. La Copa dejará espacio para que los menos habituales vuelvan a ganarse la confianza del entrenador. Eso, salvo que lleguen con ofertas para marcharse que merezcan la consideración del Madrid, lo que tampoco será fácil.

El club blanco tampoco espera recuperar a Kubo en el mercado invernal, ya que el Villarreal pagó por la cesión del jugador japonés y el Madrid ya ha consolidado esa cantidad en sus cuentas. En Concha Espina están siendo muy estrictos con los presupuestos ya que el impacto del virus está siendo enorme. Para muestra, un botón: el presupuesto destinado al estadio y su explotación ha pasado de los 175 millones estimados en principio a sólo nueve. Esta austeridad ha permitido al Madrid superar los estragos del COVID-19 mucho mejor que otros clubes que están en quiebra o a punto de declararla, pero también ha llevado a la entidad a tener una postura negociadora muy dura con los nuevos contratos y renovaciones. Pero esto es otra historia.