La ONG Amnistía Internacional destinará veinte secciones de su organización a pedir a las diferentes federaciones de fútbol presentes en el Mundial de Catar 2022, así como a la FIFA como organizadora, que velen por los derechos humanos de los trabajadores migrantes en el país catarí.

Amnistía Internacional recalca en un comunicado que la FIFA, como entidad organizadora del Mundial, tiene el «deber de garantizar» el respeto de los derechos humanos en el contexto de los preparativos y el desarrollo de la competición.

«Como entidad organizadora de la Copa Mundial, la FIFA tiene el deber de garantizar el respeto de los derechos humanos en el contexto de los preparativos y el desarrollo de la competición. Eso incluye la obligación de hacer rendir cuentas a sus socios de la Copa Mundial y utilizar su influencia para presionar a Catar a fin de que reforme plenamente su sistema laboral«, manifestó la entidad.

Por ello, veinte secciones de Amnistía Internacional se dirigirán a las federaciones nacionales de fútbol con el objetivo de que «intervengan activamente» para garantizar los derechos de las personas migrantes en el Mundial de Catar, previsto para 2022.

Creen, además, que las federaciones de fútbol deben exigir a la FIFA que utilice su voz para instar, tanto en privado como públicamente, al gobierno de Catar a cumplir su programa de reformas laborales antes de que comience el Mundial.

Según Amnistía, Catar debe «reforzar la aplicación de sus reformas laborales» y poner fin a la «impunidad» de los empleadores que cometen abusos si pretende cumplir plenamente sus promesas de proteger los derechos de los trabajadores y trabajadoras.

En concreto, la rama española de la organización, pretende reunirse con el presidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF), Luis Rubiales, para hablar de la situación de Catar y otros asuntos de deporte y derechos humanos, como la Supercopa de España 2021, que se celebrará en Arabia Saudí el próximo mes de enero.

En este sentido, Amnistía recuerda que la RFEF anunció el año pasado, antes de la celebración de la Supercopa 2020 en Arabia Saudí, un programa de acciones encaminadas a mejorar la situación de las mujeres en este país. «Desafortunadamente, la situación, un año después, sigue siendo igual o peor», lamentaron.

Pocos avances en Catar

Amnistía recalca que, desde que le adjudicaron la organización del Mundial de la FIFA para 2022, Catar se enfrenta a un control más estricto de su historial en materia de derechos de las personas trabajadoras migrantes, aunque no ha avanzado demasiado en ello.

En los últimos años, Catar ha introducido una serie de reformas importantes, como la modificación de la legislación para permitir la libertad de circulación de los trabajadores.

«Sin embargo, muchas personas trabajadoras migrantes aún no se han beneficiado de estos cambios y seguirán atrapadas en el círculo vicioso de explotación mientras estas reformas no se apliquen plenamente», denunció el director de Justicia Económica y Social de Amnistía Internacional, Steve Cockburn.

TOMADO DE DIARIO AS