En el Liverpool-Chelsea que acabó decantándose para los campeones de liga (5-3) sigue dando que hablar días después de su finalización. Si primero fue la polémica celebración de los reds, marcada por la irresponsabilidad a las afueras del estadio y la espectacularidad dentro de él, ahora es la tensión con la que Frank Lampard vivió el choque la protagonista de la historia. Las cámaras captaron al técnico inglés exasperado en la banda y atacando verbalmente al banquillo contrario.

Todo comenzó cuando Andre Marriner, árbitro de la contienda, señaló falta de Mateo Kovacic sobre Sadio Mané, la cual convertiría en el segundo gol del choque Trent Alexander-Arnold. El murmullo posterior en el área técnica del Liverpool desató la ira del entrenador blue«¿Cómo fue la falta? No existe falta ahí», gritó Lampard mientras dirigía su rabia hacia Pep Lijnders, segundo de Jurgen Klopp. «Siéntate entonces», gritó de nuevo. Momento en el que intervino el alemán para tratar de apaciguar las aguas, «Calma, calma», no sin antes enviar una advertencia a su homónimo: «No hables con mi número dos…». Pero un exaltado Lampard no le dejó terminar su frase, «no, no, si va contra mí, ¡diré algo, jo…!».

«Bien jugado, pero no seas tan arrogante»

Tras la intervención de Lee Mason, cuarto árbitro, la situación perdió temperatura, hasta que se escuchó un «aun así, es falta», desde el banquillo red«¡No es una jo… falta. No te estoy preguntando. Cállate!», reaccionó el técnico del Chelsea antes de ser interrumpido por un Klopp visiblemente molesto, «hey». «¡Que te den a ti también! Ganas un título y te vienes jo… arriba, que te jo…!». Mason hubo de intervenir de nuevo y separó la pelea, pero se pudo escuchar a Lampard tratar de tener la última palabra: «Diles que tengan respeto y que se sienten». Los suplentes del Liverpool fueron testigos de excepción del dudoso espectáculo y Adrián San Miguel trató de aportar cordura a la situación, sin éxito.

Tras el partido se pudo ver a Lampard felicitar a los jugadores rivales por haber ganado el campeonato y explicó lo sucedido ante las cámaras de Sky Sports:«Para mí, no fue falta de Kovacic. (…) No tengo ningún problema con Jurgen Klopp, ha entrenado este equipo de manera fantástica». Sin embargo, demostró que la espina seguía en el zapato para cerrar su intervención: «Hay una fina línea cuando ganas y ellos lo han hecho. Bien jugado, pero no seas tan arrogante».

TOMADO DE DIARIO AS