Alejandro Domínguez, presidente de CONMEBOL, se refirió a la Copa Libertadores y en especial a los tiempos y lugar de definición del torneo más importante de clubes a nivel sudamericano.

En una entrevista con Radio Rivadavia de Argentina el principal de la CONMEBOL manifestó que la final en Río de Janeiro es el deseo pero que se debe evaluar la situación del COVID-19: «El de la final única y el estadio Maracaná es todo un tema, hay que evaluar como sigue el virus y su evolución. Nuestro deseo sigue siendo el mismo pero estamos atados a eso».

«Uno siempre quiere que la final de la Libertadores sea en Sudamérica, pero la situación es complicada», tiró el presidente del ente sudamericano.

Brasil es el país más afectado por la región con la pandemia del COVID-19 e inclusive afuera del Estadio Maracaná existe un hospital de campaña para atender a enfermos.

Con respecto a las fechas de reanudación de la reanudación de las copa internacionales, indicó: «No hay apuro para retomar la competición y si se tiene que jugar el 30/12 se jugará y en enero también. El calendario será flexible y lo primordial siempre será la salud».