La Juventus de Turín no sólo se ha mostrado interesada por Arthur Melo en sus conversaciones con el FC Barcelona. El club turinés también está muy pendiente de la posibilidad de incorporar, aunque en calidad de cedido, a Ousmane Dembélé (23 años). Y es que la Juve desea ganar en profundidad dado que uno de sus futbolistas que mejor funciona por banda, Juan Cuadrado, tiene ya 32 años. Y otro, Bernardeschi, no entra en los planes de Maurizio Sarri, siendo la mejor prueba de ello que está presente como opción en diversas negociaciones con otros clubs en las que puede haber trueques.

El caso es que la Juventus preguntó por Dembélé durante las negociaciones con el Barça para el trueque Arthur-Pjanic, tal como avanzó este diario, y el interés se mantiene aunque, es importante dejarlo claro, en forma de cesión. Básicamente porque el club ‘bianconero’ desea testar su recuperación y no quiere arriesgarse a pagar una cantidad de dinero elevada por un jugador que aún está recuperándose de una lesión. En este sentido, la gran novedad es que el francés se está planteando seriamente esta posibilidad que le ofrece la Juve.

El sueño de Ousmane sigue siendo triunfar en el Barça, aunque a nadie se le escapa que no lo está teniendo fácil. Nunca ha logrado asentarse como titular pese a ser el segundo fichaje más caro de la historia del club (el primero es Coutinho), en parte debido a varias lesiones. Dos le han obligado a pasar por el quirófano desde que llegó al Camp Nou en 2017.

La Juventus representaría para Dembélé la posibilidad de hacer un cambio de chip, de seguir en un club grande pero en otro país y en otra competición pero también con aspiraciones de ganarlo todo. Y sobre todo, de volver a jugar y a reivindicarse como crack. A Fabio Paratici, ‘capo’ deportivo juventino, le gusta mucho Dembélé y no de ahora. Además, tiene muy buena relación con su agente, Moussa Sissoko, detalle que ayuda que la operación pueda avanzar. En el Barça no la verían mal porque aunque desean que Dembélé triunfe de una vez para que se demuestre que la apuesta no fue fallida, también saben que un cambio no le iría mal. Y si la oferta es buena, ya sea como cesión o fichaje (más difícil), todo es planteable tal como está la economía del club.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO