Romelu Lukaku concedió una videoentrevista al exjugador inglés Ian Wright en la que habló de su aislamiento en su casa de Milan, una de las zonas más afectadas por el coronavirus en Italia.

«No puedo salir, no puedo entrenar… Lo echo de menos, como jugar ante los aficionados. Llevo nueve días encerrado y casi me vuelvo loco ayer. Echo de menos la vida normal y ver a mi hijo, a mi madre, a mi hermano… En esta situación, comienzas a valorar lo que tienes», aseguró el belga.

«Soy un chico afortunado. Debes tener mucho cuidado porque puedes tocar a alguien y que tenga el virus. Mi madre tiene diabetes y un mayor riesgo. Así que ni siquiera puedo ir a su casa y tocarla. Mi madre ni siquiera está saliendo ahora», explicó.

Lukaku explicó su día a día en aislamiento: «Muchos jugadores vivimos en el centro en apartamentos pequeños y nos trajeron una bicicleta para poder entrenar. Desde el club me traen todos los días la comida para seguir con mi estricta dieta».