Gareth Bale y James Rodríguez, como jugadores no convocados, estaban obligados a estar en el estadio Santiago Bernabéu para presenciar el partido de su equipo ante el Betis. Pero ninguno de los dos esperó al pitido final para abandonar el estadio. Ambos jugadores se marcharon con 0-0, con su equipo jugándose el liderato y a diez minutos de que Sánchez Martínez señalase el final del encuentro.

Un encuentro que acabó durando 96 minutos pero del que Gareth Bale sólo vio 84, porque en ese minuto abandonó el coliseo blanco. James Rodríguez se fue dos minutos después, en el 86′. Los dos escucharon desde su coche el final del duelo y el empate final del Real Madrid, que se quedó sin liderato.

Ya en el último encuentro Gareth Bale se marchó antes de tiempo, con permiso para abandonar el estadio a partir del 80′ por las obras en el Bernabéu y así poder salir sin problemas ni aglomeraciones.