El Liverpool perdía 1-0 con Aston Villa, cuando parecía que el invicto se esfumaba Andrew Robertson , anotaba el empate transitorio en el minuto 86. El otro, de Sadio Mané, en el 94’ el que dio una victoria que parecía imposible, el que dejó las cifras claras: 2-1 para los de Anfield.

Liverpool llegó a 31 puntos y demostró que está en condiciones de pelear hasta el final manteniendo el sueño de no solo coronarse en la Premier sino hacerlo de forma invicta como solo lo ha hecho el Arsenal de Arsene Wenger