La revancha de la semi de la Libertadores en La Boca será una batalla, está claro. Pero no solamente en la cancha. Y el antecedente de la final de la Copa 2018 en el Monumental es el indicio más notorio. Por eso, las medidas de seguridad serán extremas desde que el micro que trasladará al plantel de River salga desde el club camino a La Boca. Es más, la movida arrancará más de cuatro horas antes del partido, con el banderazo que la Subcomisión del Hincha de River anunció para las 17 en el estadio para despedir al equipo con murga, bengalas y todo el cotillón posible de la Banda.
Cuando el micro salga rumbo a la Bombonera, será seguido por dos helicópteros del Escuadrón Aéreo de la Policía Federal y estará monitoreado en tiempo real por las brigadas de Exteriores de Video. Además, el ómnibus estará “encapsulado” (como denominan las fuerzas de seguridad) por unas 50 motos para evitar que la gente se acerque a menos de 30 metros del mismo, se produzcan posibles emboscadas o agresiones. El móvil que traslada a a Gallardo y compañía cuenta con un sistema antivandálico como protección ante un piedrazo o cualquier otro proyectil. De hecho, ya pasó una prueba en el La Plata antes del partido ante Gimnasia: los vidrios agredidos quedaron astillados pero no se rompieron.