El Papa Francisco ha pronunciado un discurso a los casi cinco mil participantes en el encuentro «El fútbol que amamos», promovido por La Gazzetta dello Sport y la Federación Italiana de Fútbol.

«Muchos definen el fútbol como el juego más bonito del mundo. Pienso lo mismo, pero es una opinión personal. Si bien, a menudo escuchamos a la gente decir: ‘¡El fútbol ya no es un juego!’. Dejando en claro que: «el fútbol es un juego, y debe seguir siéndolo».  Este ha sido el discurso con el que el Papa ha dejado claro su amor por el fútbol, pero en el que también ha recordado que no todo lo que rodea a la pelota es bueno.

Sobre lo que representa el fútbol, el Papa Francisco ha dejado en evidencia a todos los que dicen que se trata de 22 personas corriendo tras un balón: “Podemos decir que detrás de una bola rodante hay casi siempre un niño con sus sueños y aspiraciones, su cuerpo y su alma. En una actividad deportiva están involucrados no sólo los músculos, sino toda la personalidad de un niño, en todas sus dimensiones, incluso en las más profundas”.

Destacando el fútbol como un juego de equipo, su Santidad, prosiguió su discurso: “Lo bueno de jugar con un balón es que puedes hacerlo junto con otros, pasarlo en medio de un campo, aprender a construir acciones de juego, trabajar en equipo”.