La FIFA confirmó que no hubo casos de dopaje antes y durante la celebración del Mundial de Rusia, al menos hasta la ronda de semifinales.
Luego de realizar más de 2 mil controles y haber hecho 4 mil pruebas a un mínimo de 1500 jugadores, reconociendo que ha sido la mayor campaña antidopaje en la historia del torneo.

«Con la Copa Mundial de la FIFA 2018 a punto de finalizar, la FIFA desea anunciar el jueves 12 de julio que, hasta la fecha, los análisis de todos los controles antidopaje realizados antes y durante la competición han dado resultados negativos. La campaña antidopaje llevada a cabo este

año ha sido la mayor nunca realizada durante un Mundial de la FIFA», explicó la organización afincada en Zúrich.

Todos los futbolistas participantes en la edición de este año se sometieron a controles efectuados sin previo aviso antes de la competición; durante la competición, se realizaron análisis sistemáticos, que incluyeron controles posteriores a los partidos y otros que tuvieron lugar en jornadas de descanso.

La media de controles que han tenido los futbolistas clasificados para las semifinales son de «4.41 pruebas desde enero», pues la FIFA se puso en contacto con las distintas federaciones para que colaborasen con el estudio. Esta dato puede subir hasta los 8 exámenes en algunos jugadores.

De entre todos los controles, solo hubo tres resultados anómalos, pero que no se pueden catalogar como negativos hasta que la Unidad Antidopaje de la FIFA lo investigue en profundidad. «Una vez concluida la investigación, se notificaría al jugador, al club, a la federación afectada y a la AMA si el resultado anómalo se tramitará como un resultado analítico adverso», concluyó.