El expresidente del FC Barcelona, Sandro Rosell, admitió hasta en cuatro llamadas telefónicas la “compra de un hígado ilegal” para el entonces jugador del club y actual secretario técnico, Eric Abidal, que fue sometido a un transplante de ese órgano en 2012 para combatir el cáncer que sufría.

Según El Confidencial , la conversación fue interceptada por la Policía Nacional y la Guardia Civil.