El baile de nombres que baraja la selección italiana para encontrar técnico no para. Carlo Ancelotti parece que ha tomado la delantera a Mancini para suceder a Di Biagio en el banquillo de la azurra después del fracaso de no clasificarse para el Mundial de Rusia.

No obstante, no todo son facilidades para poder contratar a Ancelotti, que deberá ser confirmado después del 20 de mayo, al terminar la Serie A, aunque podría anticiparse, según informa la ‘Repubblica’. Aunque el ex del Bayern de Múnich siempre haya sido el favorito para Malagò, presidente de la federación italiana, la lista de candidatos incluía otras opciones interesantes como Mancini, Conte, Ranieri e incluso el interino Di Biagio. Además, ‘Carletto’ siempre se ha mantenido discreto en sus vínculos con la selección y, de hecho, habló recientemente de que su futuro en los banquillos estaba ligado a un club.

Aun con estas, la federación italiana de futbol (FIGC), no ha perdido las esperanzas y está dispuesta a sacar todas las armas disponibles para convencer a Ancelotti. En lo económico, una de las grandes barreras, se puede alcanzar los 6 millones de euros. Sin embargo, son las garantías técnicas, de planificación y plena autonomía las que pueden jugar el papel más importante para convencerlo. Además de aceptar sus exigencias, como la de incorporar como su ayudante a Andrea Pirlo, como también a su hijo, algo que se comería el presupuesto de la selección, el gran problema.