El organismo de control contable de clubes de la UEFA ha ordenado una auditoría independiente de los contratos que el París Saint-Germain (PSG) tiene con entidades cataríes, dentro de la investigación abierta a ese club para determinar si cumple con las reglas del juego limpio financiero.
Según publica este miércoles el diario “L’Équipe”, esa auditoría puede evaluar a la baja esos contratos, lo que obligaría al conjunto francés a buscar una cantidad superior a los 75 millones de euros inicialmente demandados para equilibrar sus cuentas.
Es el fruto de la investigación abierta por la Instancia de Control Financiero de los Clubs (ICFC) de la UEFA después de que el PSG desembolsara 222 millones de euros para fichar al brasileño Neymar y otros 190 millones por el francés Kylian Mbappé, cifras astronómicas que sorprendieron al mundo del fútbol.
En el punto de mira de ese organismo están los contratos con el banco Qatar Nationial Bank, el operador de telecomunicaciones Ooredoo, el canal de televisión BeIn Sports, el organismo de promoción turística de Catar (QTA) y la clínica deportiva Aspetar.
Como los contratos con esas empresas superan el 30 % de los ingresos de patrocinio del club, la ICFC ha aplicado el reglamento que le obliga a revisarlos, señala el rotativo.
Esa auditoría deberá determinar si esos contratos reflejan el precio real de mercado y, en caso contrario, corregirá a la baja su impacto en los ingresos del club.
Si eso se produce, el PSG verá aumentar el desequilibrio contable de sus cuentas, valorado inicialmente en 75 millones de euros.
No es la primera vez que el equipo de la capital francesa ha visto cómo la UEFA revisaba sus contratos de patrocinio.
En 2014 evaluó el contrato firmado con QTA en 100 millones de euros, la mitad de lo declarado por el club.
Entonces, la UEFA impuso al club una multa de 20 millones de euros, además de limitar a 25 el número de jugadores que podían disputar la Liga de Campeones, y de controlar sus traspasos durante varios meses.
Preventivamente, siempre según “L’Équipe”, el PSG había inscrito en sus cuentas para esta temporada 100 millones de euros de ingresos de QTA, pese a que el contrato real es de 175 millones.
Por el momento, el club francés debe generar unos ingresos de 75 millones antes del final de temporada.
El PSG ha generado hasta ahora solo los 28 millones de euros del traspaso del brasileño Lucas Moura al Tottenham, lo que le obligará a vender más jugadores en el próximo mercado de fichajes.
Además, el club cuenta con mejorar los contratos de patrocinio que tiene con otras empresas gracias a la mayor notoriedad que ha adquirido el equipo tras los fichajes de Neymar y Mbappé.
Según “L’Équipe”, el equipo espera negociar al alza los 25 millones que le paga la firma deportiva Nike, que también patrocina a los dos fichajes estrella de esta temporada.
Igualmente confía en aumentar los 25 millones de euros que la aerolínea Emirates le abona por figurar su marca en la camiseta del club.