El Milan vuelve a Europa después de tres temporadas y quiere hacerlo a lo grande. Completada la venta de Berlusconi al holding asiático de Li Yonghong, la nueva era del equipo rossonero cuenta ya con siete caras nuevas, ‘Los siete magníficos’ como los ha bautizado el club, los responsables de devolverle el brillo a un club histórico, el segundo con más Copas de Europa, siete, sólo por detrás de las 12 del Real Madrid.

André Silva, Conti, Çalhanoglu, Ricardo Rodríguez, Musacchio, Borini y Kessié se han puesto la rossonera este verano. Una inversión de 146 millones de euros (que podría ser mayor según avance el mercado) para que el Milan vuelva a brillar en Italia y en el continente. Su objetivo no puede ser simple, es doble y acorde al proyecto. Reconquistar el Scudetto y que su nombre se escriba de nuevo en lo más alto del fútbol europeo.

La gran estrella de Milanello será André Silva, al que muchos ven como una nueva versión de Cristiano Ronaldo y que ya ha brillado junto al madridista en la pasada Copa Confederaciones y también en el fútbol portugués. El delantero debutó en el primer equipo del Oporto en enero de 2016, propulsado por el técnico español Julen Lopetegui. Poco a poco se ganó el puesto de titular y la pasada temporada logró 21 goles en 44 partidos contando todas las competiciones.

El Milan no levanta un título de liga desde la 2010-11, hace demasiado tiempo para un club que tiene que ver en la distancia como la Juve celebra Scudetto tras Scudetto y ya van seis consecutivos. Este verano se antojaba como el más importante de la década para el equipo rossonero y, de momento, se han puesto los cimientos para volver a levantarse como un templo del fútbol italiano.