El Estadio Monumental se vestirá de gala nuevamente, esta vez para lo que será el partido entre el Barcelona SC y el Palmeiras de Brasil por los octavos de final de la Copa Libertadores.
Y es que el escenario guayaquileño que tantas noches especiales de Copa que vivió en la década de los noventa, volverá a recibir un duelo de esta instancia tras trece años.
La última vez que se jugó unos octavos de final de Libertadores en el Monumental fue el 6 de mayo del 2004 cuando BSC empató sin goles ante el Once Caldas de Colombia, club que a la postre se coronaría campeón ese año.
Los dirigidos por Guillermo Almada saben que este es un partido trascendental para los objetivos de la temporada y por eso lucharán al 100% con el fin de superar al último campeón de Brasil.