“Es de otro planeta… ¡y de mi barrio!”, se puede leer en un mural impresionante que estaba ayer pintando un artista en la calle Estado de Israel de Rosario, a pocos metros de la casa en la que nació y creció Leo Messi. Esta semana la ciudad que vio nacer al crack azulgrana está más orgullosa que nunca de él. “Lleva casi veinte años en Barcelona, pero nunca dejó de sentirse rosarino y vino aquí a casarse”, decía ayer un vecino de la familia Messi. La elección de Rosario como sede de la boda con Antonella, su novia de toda la vida y del mismo barrio que él, ha revolucionado la ciudad, que se ha volcado con Messi más que nunca. Además, las calles principales de la ciudad están engalanadas, porque el 20 de junio se celebró el día de la Bandera y el 9 de julio es el día de la Independencia, aunque más de uno piensa que es por el enlace del azulgrana.
Cuando uno llega esta semana al Aeropuerto de Rosario, lo primero que le preguntan es si viaja para la boda de Messi. Te subes a un taxi y en la radio están hablando del enlace. Es la boda del año. El evento del siglo en Rosario. “Tenemos un lío tremendo, estamos conmocionados”, decía una de las trabajadoras del aeropuerto.
Para el día de hoy está previsto que aterricen doce vuelos privados en el Aeropuerto Internacional Islas Malvinas de Rosario, todo un récord. Ayer ya llegaron, cargados de trajes, futbolistas argentinos como el Kun Agüero, el Pocho Lavezzi o Pablo Zabaleta, de los primeros en aparecer por Rosario. Y hoy lo harán buena parte de los que despegaron ayer noche de Barcelona, como Xavi Hernández, Sergio Busquets o Jordi Alba, entre otros, mientras que Luis Suárez y Neymar viajarán directamente desde sus países, mucho más cercanos. En total son 260 invitados.
En Rosario la boda de Messi y Antonella es el tema estrella. Pero se conocen pocos detalles, puesto que el hermetismo en torno al enlace es máximo. Todos aquellos que tienen relación con la boda, desde los camareros hasta el disc-jockey, han firmado un estricto contrato de confidencialidad. Y en el hotel nadie se atreve a dar detalles, ni siquiera de la sala en la que se celebrará la boda civil. Leo y Antonella han elegido para el enlace el Casino City Center, un complejo en la entrada de la ciudad que tiene hotel, centro de convenciones y casino. El hotel será estos días de uso exclusivo para los invitados, la ceremonia se celebrará en el centro de convenciones y el casino estará abierto, pero con acceso independiente al del hotel y esta vez sin conexión interna.
Ayer los operarios incluso estaban colocando unas cortinas negras en la pasarela de vidrio que comunica el vestíbulo del hotel con el centro de convenciones, por la que desfilarán todos los invitados pero que no podrán ser vistos. Lo único que ha trascendido es la actuación musical de la ‘Princesita’ Karina, que es la novia del Kun Agüero y que interpretará una cumbia tradicional argentina.
150 periodistas de 60 países
La agencia que se ocupa de los asuntos de comunicación de Leo Messi ha acreditado para el evento a 150 periodistas de 60 países distintos, que serán ubicados en una sala de trabajo en el mismo hotel pero que no tendrán acceso a al boda puesto que se trata de un acto privado.