Independiente llegaba a Perú con la obligación de ganarle a Alianza Lima tras el empate 0-0 en Avellaneda para pasar a la segunda ronda de la Copa Sudamericana.

Y el Rojo de Ariel Holan, que llevaba 13 partidos sin perder desde que llegó el entrenador ex Defensa y Justicia hizo lo que tenía que hacer. Y aunque no fue el mejor partido del conjunto de Avellaneda, fue una buena presentación del conjunto argentino que fue más inteligente que el rival y no se dejó llevar en ningún tramo del encuentro por la ansiedad ni el nerviosismo.

Con eficacia y tranquilidad, llegó al 1-0 a los 31 minutos gracias a la insistencia de Emmanuel Gigliotti, que la peleó ante el arquero y logró que este diera rebote para que Rigoni gritara el único gol de la noche.

Después, supo mantener la diferencia con autoridad y, sin pasar ningún sobresalto, se quedó con la victoria que le permite clasificar a 16avos de final de la Copa y sumar 14 sin perder.