Tras dos largas semanas de espera, el derbi de Manchester descuenta las horas para dirimir quien se adueña de Old Trafford. El silencio ha dado paso al análisis, y Pep Guardiola ha comparecido en la previa del gran choque entre United y City ante una sala de prensa repleta de medios de comunicación. Muy distinto a lo acontecido en Carrington, donde Mourinho solo ha permitido la entrada a 20 periodistas expresamente invitados por el club.

Alejado de la polémica que suscita el enfrentamiento entre Mourinho y Guardiola, el técnico catalán se desmarcó rápidamente: “A nivel deportivo ya he explicado más de una vez que tengo mucho respeto por él. Siempre intento aprender de mis colegas y la rivalidad entre ambos es más una cuestión mediática”, sostuvo Pep en la previa. “No jugamos entre nosotros, juegan nuestros equipos”, añadió. Sobre la relación personal que mantienen, el de Santpedor apuntó que “hablé con él en la reunión de la UEFA de forma distendida. Nuestra relación es correcta, a pesar de que la última etapa en Barcelona y Madrid no fue fácil”. Por si hubiera dudas, Guardiola afirmó que “si Mourinho me invita a una copa de vino la aceptaré”.

Con muchas ganas de saborear lo que es un derbi en Inglaterra, Guardiola pidió tiempo para valorar la experiencia: “De momento solo tengo tiempo para vivir con mi familia y en las instalaciones deportivas del City. La gente en la calle es muy agradable pero dejadme a que mañana se celebre el partido”, señaló contento por formar parte de un choque que paralizará no solo la Premier, sino el panorama internacional.