En el fútbol ecuatoriano han existido muchos jugadores que llegaron con buen cartel y al final de cuentas, no rindieron y terminaron siendo un fracaso por completo.

Lamentablemente, BSC ha sido en los últimos años uno de los clubes que ha incurrido más en este error, y en la desesperación por ver el fracaso de dichos jugadores, las dirigencias decidieron rescindir contratos, en la mayoría de los casos, con claúsulas de ‘Ripley’.

Según ha podido confirmar este medio, Nicolás Olmedo, aquel ex jugador de BSC que fue fichado en 2013 y que no cumplió con las expectativas, ha presentado un reclamo por una deuda pendiente que asciende a los $300 mil dólares.

Esa cifra parece casi insólita, si se toma en cuenta la cantidad de partidos que disputó con la camiseta amarilla (apenas seis: 4 en Copa Libertadores y 2 en el Campeonato Nacional). Esto nos da a entender que Barcelona tendrá que pagar casi $50 mil dólares por partido jugado.

Ahora, es un hecho que el equipo amarillo debe cumplir con lo pactado, para la nueva directiva encabezada por Cevallos lamentablemente debe ser así. Una raya más al tigre y una ‘culebra’ más por cancelar.