“Así que esto es lo que se siente”, seguramente habrá pensado LeBron James al chocar de nuevo con los Denver Nuggets. Lo que él hizo a otros como los Toronto Raptors a lo largo de su carrera, al final le ha terminado pasando a sus Los Angeles Lakers y a él en estas dos temporadas. Enfrentarte a un rival, más grande, más fuerte y mejor que tú. Y terminar cualquier atisbo de esperanza tras un contundente 4-1, en muchas ocasiones de manera muy cruel cuando los Lakers ya rozaban la victoria.

Así terminó la 21ª temporada en la NBA de LeBron James, otro año histórico e inaudito en la liga para alguien de su edad. Tan solo seis jugadores en la historia llegaron a este número de temporadas: LeBron, Dirk Nowitzki, Vince Carter, Kevin Garnett, Robert Parish y Kevin Willis. Entre los otros cinco jugadores sumaron 1.230 puntos. LeBron esta temporada ha llegado a los 1.822 puntos.

Si no hay ninguna sorpresa mayúscula, LeBron llegará la temporada que viene a los 22 años en la NBA, igualando el récord de Vince Carter. Visto lo visto hasta ahora, probablemente podría superar esa cifra después. Pero, llegados a este punto, ¿qué motivaciones tiene LeBron? ¿Qué va a suceder ahora con él? En su rueda de prensa no despejó dudas ni se pronunció al respecto.

El asunto Bronny James

Se ha hablado tanto del futuro de LeBron y de su voluntad de jugar en la NBA junto a su hijo Bronny, que va a ser inevitable que los análisis sobre su futuro pasen primero por lo que suceda con su primogénito.

Hace unas semanas Bronny James y Klutch Sports anunciaban que el jugador se apuntaba al Transfer Portal de la NCAA y al Draft de la NBA al mismo tiempo, lo cual le abre dos caminos posibles. El Transfer Portal es una especie de agencia libre de la liga universitaria, en el que los jugadores se apuntan y reciben ofertas de las universidades que estén interesadas en ellos. Anteriormente si un jugador de una universidad se iba a otra casi siempre tenía que pasarse un año en blanco, de lo que llaman redshirt, pero ya no es así. Bronny podría decidir irse a otra universidad y poder jugar la temporada que viene. Con el desastre que ha sido USC este año, es casi imposible que le vaya peor.

Pero también podría presentarse al Draft de la NBA. Durante estas próximas semanas tendrá la oportunidad de tener entrenamientos privados con las franquicias para que estas le valoren y él pueda ver si está listo, o qué es aquello en lo que debe mejorar. El de este año parece que es un Draft flojo, lo cual aumentaría sus posibilidades de salir elegido, pero la mayor parte de los ojeadores parecen pensar que no está listo para dar el salto.

“Bronny es uno de los bases con mejores condiciones de esta generación, especialmente a nivel atlético y defensivo. A pesar de eso, aunque este año nos encontramos en un Draft teóricamente débil, creo que no debería dejarse seducir tan pronto”, dice Bryan García, de College Letter. “Entiendo la magnitud que puede suponer coincidir junto a su padre en la NBA, pero en lo personal creo que sería dar un paso en falso este verano».

“Su temporada ha estado marcada por las semanas de inactividad con el problema de corazón y la falta de desarrollo en el programa de USC”, dice Javier Molero, de Draft Lab. “No está listo para dar el salto. Tiene que crecer como jugador, mejorar la confianza en el tiro y ser más activo en ataque. La decisión lógica sería quedarse un año más”.

Pero si la NBA llama, y dados los rumores que siempre le unen a LeBron, habrá muchos equipos que se planteen draftearle, puede que quiera aprovechar la oportunidad. Bronny tiene abiertas ahora mismo dos vías, y tiene hasta el mes de junio para decidir qué camino va a seguir. Los Lakers, según apuntaba hoy mismo The Athletic, están abiertos a elegirle en el Draft de 2024.

Su contrato y la situación de los Lakers

Antes de seguir adelante, lo más importante es que todo parece indicar que LeBron quiere seguir en Los Ángeles. Es feliz con su familia allí, con su vida de Hollywood y con su productora. No podemos pensar que sea muy feliz con el resultado deportivo de esta temporada, pero también le gusta formar parte de los Lakers. Sería muy sorprendente que lleguemos a ver a LeBron con otra camiseta que no sea la púrpura y oro antes de que se retire.

Dicho lo cual, como su hijo Bronny, LeBron tiene también un par de caminos abiertos para este verano. Tiene un año de contrato más con los Lakers, pero se trata de una opción de jugador (por valor de 51,4 millones de dólares) que seguramente rechace, con lo cual es posible que se convierta en agente libre. Esa opción debe ejercerla como tarde el 29 de junio, cuando ya se habrá celebrado el Draft de la NBA, y todos sabremos lo que ha pasado con Bronny. Si su hijo sale elegido en el Draft por otra franquicia que no sean los Lakers, LeBron tendría la posibilidad de irse a esa otra franquicia como agente libre.

No parece, de todas maneras, que eso sea lo más probable. Primero porque casi todos los expertos siguen pensando que Bronny regresará a la NCAA un año más. Segundo, porque seguramente LeBron sí que rechace la opción de jugador y se convierta en agente libre, pero lo hará con otros dos motivos en mente.

Uno de esos motivos por los cuales le conviene ser agente libre es asegurarse una cláusula antitraspaso en un nuevo contrato con los Lakers. Esas cláusulas permiten a un jugador vetar cualquier traspaso en el que le involucre su equipo. Solo las pueden tener jugadores con al menos 8 años de experiencia y 4 temporadas en la misma franquicia, y solo se pueden incluir en contratos nuevos, no se pueden añadir en extensiones de contrato. Ahora mismo solo Bradley Beal tiene este derecho a veto. Según decía hace unos meses Brian Windhorst, LeBron quiere esa cláusula.

El otro motivo es meter presión a los Lakers para que hagan cambios en la plantilla y sigan intentando mejorarla. Después de estar en las Finales de Conferencia hace un año los Lakers solo hicieron movimientos menores e insuficientes. Y si algo siempre le ha gustado y se le ha dado bien a LeBron, es meter presión a sus franquicias, ya fuera firmando contratos de año en año en Cleveland, haciendo declaraciones a periodistas cercanas al trade deadline, dejando caer que le gustaría regresar a los Cavaliers, hablando de su posible retirada, etcétera.

Los Lakers tendrán algunas herramientas más para tratar de mejorar el equipo este verano. En principio podrán contar con tres primeras rondas y ya hace tiempo que empezaron a salir nombres como los de Dejounte Murray o Trae Young. Lo más seguro es que veamos a LeBron James de nuevo la temporada que viene, año 22 en la NBA, en los Lakers con una plantilla renovada. Pero tanto LeBron James como Bronny tienen varios caminos abiertos por si quieren cambiar su rumbo.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO