Emad Babiker debió escapar de Sudán a raíz de la guerra que cruza a su país. Recaló en Alemania como refugiado y pudo sumarse al Deinster SV, un pequeño club que demostró su grandeza luego de unos tristes hechos que afectaron a su jugador.

En medio de la tolerancia cero que está proliferando en Europa con los refugiados, Emad sufrió un violento ataque racista, en el que fue golpeado e insultado, simplemente por ser inmigrante. Una escena que se repite.

Sus compañeros decidieron llevar a cabo una interesante movida que se convirtió en viral por las redes sociales. A través del Facebook de la institución, subieron una foto del plantel en la que todos están pintados de negro.

«Nuestro amigo y compañero Emad fue insultado y golpeado por motivos racistas. Eso es simplemente triste. La violencia contra los refugiados es patética. Pertenece a nosotros como cualquier otro jugador del club», escribieron en la publicación.