Aunque parezca mentira, siempre hay retos para Leo Messi. El genio argentino afrontará el día de hoy uno más en su carrera en un partido que supondrá el reencuentro con un portero de época. Hace casi cuatro años vivió ante Petr Cech una de sus noches más amargas como jugador del Barça. El entonces guardameta del Chelsea enlazó su sexto partido imbatido ante Messi, que no pudo romper su maleficio contra el checo hasta el punto de estrellar en su larguero un balón en un penalti que pudo haber metido al equipo de Pep Guardiola en la final de Múnich. Los azulgrana ganaban por 2-1 y necesitaban un tanto más para remontar el 1-0 de Stamford Bridge y sellar el billete. Era el minuto 48 pero el Barça se estrelló una y otra vez en la muralla londinense con Cech como último guardián. No llegaron los goles y en el minuto 92 Fernando Torres acabó de sepultar las esperanzas culés metiendo el 2-2.
Leo lloró en el vestuario tras esfumarse el sueño de la segunda Champions League consecutiva, un aliciente que vuelve a a motivar a lo grande al vestuario azulgrana para hacer historia en Milán el 28 de mayo.
Hoy se las verá de nuevo con el gigantón checo (1,96), que cambió de barrio en la capital inglesa en verano a los 33 años y ahora aporta más seguridad a uno de los tradicionales puntos débiles del Arsenal de Wenger. Tenía Cech 23 cuando se enfrentó por primera vez a Leo, aún con 18, el día que José Mourinho empezó a hablar del teatro. Ayer hizo 10 años que Messi forzó la expulsión de Asier del Horno en el 1-2 del Barça. El argentino fue decisivo pero no marcó ante Cech como tampoco lo hizo en sus siguientes cinco duelos ante él. En la vuelta de aquellos octavos se lesionó dos meses antes de una final de París ante el Arsenal que vio al lado del banquillo. Y en las semifinales de 2009, resueltas por Andrés Iniesta con su inolvidable gol, tampoco vio puerta (0-0 en el Camp Nou y 1-1 en Stamford Bridge) si bien dio el pase del gol al manchego. Tampoco en el estadio ’blue’ marcó en el 1-0 de la ida de 2012, antesala de aquel penalti marrado ante Cech.
Messi quiere quitarse hoy la espina con el checo como portero de un Arsenal al que tiene la medida cogida pero no en el Emirates Stadium. En ninguno de los dos encuentros disputados en el feudo ‘gunner’ anotó Leo. Ni en el 2-2 de la ida de cuartos de 2010 ni en el 2-1 de la ida de octavos de 2011, cuando sí sirvió el pase del pasajero 0-1 a David Villa.
La historia de Messi con el Arsenal ha sido muy diferente en Barcelona, donde ha marcado seis goles en dos partidos. Cuatro firmó en la exhibición del 4-1 de 2010 con Manuel Almunia bajo palos y dos más en la remontada (3-1) de 2011 con Wojciech Szczesny de portero. El club del norte de Londres es además el tercero al que más tantos ha marcado el rosarino en la Champions por detrás de Milan (8) y Bayer Leverkusen (7). Leo quiere engordar la cuenta esta noche en una City que le vio conquistar su tercera Champions en Wembley en 2011
