El Roma triunfó en el Franchi y le arrebató el primer puesto de la Serie A a la Fiorentina: la Viola cerró así una semana muy negativa en los resultados (perdió también ante Nápoles y Lech Poznan) donde sin embargo no dejó de mostrar un buen fútbol, aunque menos efectivo. Ahora, en la clasificación, el equipo giallorosso manda con 20 puntos, dos más de los de Sousa, del Inter de Mancini y del Lazio, que destrozó el Torino 3-0 esta tarde gracias a los tantos de Felipe Anderson (doblete) y Lulic.

Los de Garcia, que salieron de inicio con Dzeko, abrieron la lata tras apenas seis minutos, gracias a una preciosa jugada de Salah, el hombre más odiado por el Franchi: sus extifosi, de hecho, no le perdonaron la manera en la que quiso dejar al conjunto toscano, y por eso fue pitado desde el calentamiento. No obstante, el egipcio rompió el partido con una preciosa rosca tras una pared con Pjanic, y no celebró el tanto intentando mostrar respeto hacia su vieja afición.

A partir de entonces la Viola, que sin el lesionado Marcos Alonso utilizó a Bernardeschi en la banda izquierda, se volcó al ataque cometiendo un error garrafal en el 34′: tras un saque de esquina de los locales, Florenzi cedió a Gervinho que con su típica larga carrera pudo llegar en el área solo ante Tatarusanu y batirlo. Fue un golpe duro para la Fiore, que estaba mostrando su habitual buen fútbol y que todavía no había encajado goles en su estadio.

En el descanso, recordando los errores del 4-4 de Leverkusen, Florenzi dijo: “Si hará falta, nos defenderemos también en veinte”. Y no mentía: los giallorossi continuaron dejando el mando del partido a la Viola, que a pesar de haber reforzado su delantera con Pepito Rossi y Babacar, seguía sin hacer daño. Y el Roma, por su parte, esperaba el momento perfecto para salir con sus letales contragolpes, uno de los cuales le llevó a un paso del tercer tanto: Bernardeschi, de hecho, salvó en la línea de gol un disparo de Pjanic tras un rechace de Tatarusanu. Los visitantes, sin embargo, se complicaron los últimos minutos del enfrentamiento: Salah fue expulsado por protestar demasiado tras ver amarilla en el 88′ y Babacar, a pase de Borja Valero, firmó el 1-2 segundos antes del pitido final. Un epílogo que no cambió el resultado final: en la Serie A, a partir de esta noche, mandan los giallorossi.