Cuando se quiso retomar el campeonato luego de la Copa América al Emelec se le vino un dolor de cabeza. El haber llegado hasta cuartos de final en la Copa Libertadores pasada le dejó una deuda pendiente.
Tres partidos del torneo local le restaban y tres más por cumplir en un plazo de apenas dos semanas era el reto tanto en el lo físico como futbolístico pero los resultados fueron excelentes pese a que no se logró el objetivo de ganar la etapa.
Cinco victorias y un empate fue el balance donde el DT Omar De Felippe pudo hacer variantes y los resultados no se trastocaban excepto aquel empate sobre el final ante Independiente que es el partido que lo deja sin etapa (Emelec quedó a dos puntos de LDU pero con mejor gol diferencia).
Además con el problema de que siete de sus elementos fueron a la Copa América tuvo que hacer frente a los remanentes de un semestre muy agotador. Sin dudas que pudo haber hecho más.
