El atacante del Bayern de Múnich, Franck Ribery, explicó en declaraciones a Bild la felicidad que siente después de que le quitaran el yeso que le protegía el tobillo y encarar así en las próximas semanas el periodo de rehabilitación de una lesión que le ha tenido muy preocupado en los últimos meses.

“Es bonito el tener la pierna libre. Ahora estoy mejor, aunque no al máximo. Ahora ya no tengo músculos. Debo avanzar lentamente y tengo que iniciar a ir en bicicleta”, explicó el jugador francés, del que el diario ‘L’equipe’ incluso dijo hace unas semanas que se había planteado su retirada del fútbol.

El galo parece haber recuperado la sonrisa después de que hace prácticamente un mes demostrara su desesperación con unas contundentes declaraciones: “He ido de vacaciones a Ibiza y París y he tenido que ir con mi fisioterapeuta. Esta lesión me pone nervioso, es una catástrofe. No soy libre. Quiero correr y no puedo. ¿Qué tipo de vacaciones son estas?”, exclamó en aquella ocasión.

Ribéry no ha jugado desde que se lesionó el tobillo en un duelo de la Champions League ante el Shakhtar Donetsk en marzo pasado.