Estaba muy lejos de su mejor nivel. De hecho, en algún momento sonó fuerte para seguir su carrera en la MLS. Sin embargo, él no se resignó y ayer se vistió de héroe para meter al Real Madrid en semifinales de Champions League.
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Chicharito Hernández marcó el único gol de la serie, que sirvió para eliminar al Atlético y mantener viva la ilusión de conseguir una nueva Champions.
Se llevó todos los elogios y así lo festejó, entre lágrimas y abrazos de sus compañeros.