Luego de sus declaraciones el din de semana pasado donde dijo que tenía problemas con el arriendo y la posterior respuesta de Antonio Noboa, la relación Michael Jackson Quiñónez con la directiva del Barcelona SC está en un punto muerto.

Ya es de dominio público que al volante lo mandaron a trabajar con la reserva, en la dirigencia están molestos por su poco protagonismo en el equipo amarillo y por eso han tomado esta decisión.

Hoy cuando en un diálogo sobre la marcha con Radio Caravana, el «Rey del pop» fue muy escueto manifestando acerca de su situación que «allá arriba hay un Dios…donde sea me toca trabajar».