El manager del Manchester United, Alex Ferguson, dejó de inicio en el banquillo, el pasado martes, al delantero inglés Wayne Rooney, en el partido de Champions contra el Real Madrid, uno de los partidos más importantes de la temporada según el propio club declaró.

El diario ‘Daily Mirror’ titulaba con un sorprendente “Alerta roja: El Manchester United listo para “vender” a Wayne Rooney al final de temporada”.

Y destacaba entre sus líneas que el hecho de que el jugador iniciase un partido tan trascendental como el del Real Madrid en Champions en el banquillo es un claro síntoma de que su carrera en Old Traford está llegando a su fin. Algo que por otra parte no ha gustado nada al jugador que reconoció sentirse furioso por esta decisión.

Pero a nadie le es de extrañar las persistentes tensiones entre Ferguson y Rooney debido al fuerte carácter de ambos. Fuentes de ambos bandos han dicho ‘Sportsmail’ que la relación entre la pareja viene siendo tensa desde hace tiempo y que no muestra signos de mejoría. El propio jugador en alguna ocasión ha reconocido que han tenido varios conflictos durante esta temporada.

Wayne Rooney a sus 27 años y con dos de contrato todavía por delante, sabe que su destino pasa por las manos de su entrenador, y por eso el United está dispuesto a escuchar diferentes ofertas por el jugador.

Chelsea y Paris Saint-Germain se postulan como los equipos que pujaran con mayor fuerza por él, ya que su vecino el City se cae de la lista al no tener en estos momentos ningún deseo de revivir su interés por el delantero, interés que llevo al club a intentar comprar a Rooney en el otoño de 2010.

El diario ‘Daily Mail’ por su parte señala “Ferguson harto podría vender a Rooney por 20 millones de libras” y publica entre sus páginas como Wayne Rooney se enfrenta a una lucha desesperada para salvar su carrera en el Manchester United después de que su técnico Alex Ferguson siga cuestionándose acerca de su aptitud y actitud en el terreno de juego.

Según este medio Ferguson cree que Rooney no termina de superar los problemas de peso y aptitud que han perseguido al jugador desde el inicio de la temporada, y que está harto de esperar una mejora.

‘The Guardian’ confirma que clubes como el Real Madrid y Barcelona no estarían interesados en el delantero al cuestionar su calidad para jugar al más alto nivel. Mientras que Milán, Juventus e Internazionale lucharían para financiar cualquier acuerdo. El París Saint-Germain, que tiene los fondos necesarios, también se uniría al interés por el inglés ya que está buscando un delantero que complemente a Zlatan Ibrahimovic.