La Federación de Fútbol de Hungría (MLSZ) anunció que apelará ante la FIFA la sanción impuesta de jugar a puertas cerradas contra Rumania por las eliminatorias europeas al Mundial de Brasil-2014.

Los húngaros fueron sancionados con una multa económica y jugar a puertas cerradas tras el comportamiento discriminatorio y antisemita de sus aficionados durante un amistoso ante Israel, disputado el 15 de agosto de 2012.

«Consideramos injusta y exagerada la condena. Miles de seguidores honestos se ven castigados por el comportamiento inaceptable de algunos», declaró un portavoz de la MLSZ.

La selección de Hungría medirá a Rumania el próximo 22 de marzo en el estadio capitalino Ferenc Puskás.