El Atlético de Madrid no pudo pasar del empate ante San José Earthquakes en un irregular partido de los rojiblancos. Los pupilos del Cholo dispusieron de unas cuantas ocasiones, pero no estuvieron finos de cara a puerta.

Simeone volvió a plantear el partido con mayoría de jugadores titulares en el equipo. La presencia de Insúa en el centro de la defensa junto a Miranda fue el único experimento que hizo el técnico en el segundo partido de la temporada. A falta de Mandzukic fue Raúl García el que jugó de falso nueve acompañado de Baptistao y Arda Turan. En el centro del campo, lo de siempre: Gabi, Mario Súarez y Koke.

Al equipo rojiblanco le faltó chispa en las piernas y rapidez mental, pero aún así, fue superior a su rival desde el inicio. El actual campeón de Liga llegaba con facilidad al área del equipo americano, pero la falta de claridad impidió algunas cuantas ocasiones claras. En el primer tiempo, los colchoneros dispusieron de dos muy claras. La primera la sacó el portero tras una llegada de Baptistao por la banda izquierda y la segunda fue un dudoso penalti sobre Mario Suárez. Raúl García lo lanzó al palo y Siqueira perdonó mandando el rechace a las manos del portero.

De los nuevos no se vio mucho. Juanfran estuvo más activo por la derecha que Siqueira por la izquierda y Moyá, portero titular hoy, tuvo que actuar muy poquito. Lo más destacado, sin duda, fue el turco Arda Turan que se mostró por todas las zona de ataque ante un equipo rival incapaz de pararle.

Mala segunda parte
La segunda mitad tuvo muy poca historia con un equipo español bastante cansado. Simeone metió en el campo a unos cuantos canteranos que lo intentaron sin éxito destacado. Eso sí, Moyá actuó mucho más de lo que al Cholo le hubiese gustado.

 

Conclusiones se pueden sacar muy pocos de un equipo que apenas acaba de empezar a rodar. Se aprecian las mismas intenciones que llevaron a estos hombres a la gloria, pero aún están muy lejos del nivel físico que exige esa forma de actuar sobre el campo. Además, los grandes refuerzos aún están en el otro lado del ‘charco’.