El Liverpool se ha puesto ya manos a la obra en su nuevo proyecto y no repara en gastos. Después de perder la final de la Champions League pero con la próxima edición asegurada por su clasificación en la Premier League, los ‘reds’ están trabajando ya en nuevas incorporaciones. Jürgen Klopp acaba de fichar a Fabinho por 45 millones de euros. “Puede jugar en muchas posiciones, de ‘6’, de ‘8’ y de ‘2’. Es un futbolista fantástico”, justificó el entrenador alemán para dar realce al ya ex jugador del Mónaco.

El gasto por Fabinho se suma al realizado por el centrocampista guineano Naby Keita, que eleva la cantidad hasta los 105, y eso que el mercado veraniego en Inglaterra acaba de comenzar. En este caso, el Liverpool lo adquirió el pasado verano al RB Leipzig por 60 millones de euros pero ha debido esperar una temporada para que pudiera aterrizar en Anfield. Estos refuerzos cubrirán una línea media sujeta a muchos cambios.

Y es que el Liverpool acaba de completar en el último año los tres fichajes más caros de su historia. Además de Keita Fabinho, está Van Dijk, por el que se gastaron 80 ‘kilos’. Un dispendio que eleva a 360 millones de euros el montante utilizado por Klopp desde su llegada en octubre de 2015. Claro que también han ingresado 254 en ventas, según diversas fuentes inglesas.

Hay otros ingresos también elevados. Con esta campaña liquidada, el Liverpool ha recibido en concepto televisivo 165 millones de euros, a los que hay que sumar 49,7 de la UEFA por su participación en esta edición de la Champions League en la que ha sido finalista. Desembolsos a los que hay que añadir unos 50 más por el ‘market pool’, en concepto de publicidad y esponsorización. El Leicester, hace un año, ya recibió 49,03 millones. Entre el dinero de los traspasos y lo que ha recibido por su presencia en Europa, el Liverpool puede afrontar fichajes de altos precios como el de Dembélé o el de Cillessen.