Sin duda alguna el grupo de la muerte ha sido el grupo más muerto futbolísticamente de esta Copa Libertadores 2013, equipos flojos en actitud a excepción de Nacional, de 7 partidos jugados en el grupo solo uno ha sido atractivo, el Nacional 2 Barcelona 2, que fue en la primera fecha pero hasta ahí no más.

Repasamos historia y vemos a gigantes de cada país. Boca el más grande de los últimos 15 años a nivel internacional en Sudamérica, Nacional un referente histórico de esta parte del continente y uno de los dos más grandes de Uruguay aparte que fue campeón de su país y Toluca último finalista del torneo mexicano perdiendo contra los Xolos de Tijuana de Fidel Martínez y compañía. Y ni hablar de Barcelona, el más ganador en títulos locales de Ecuador.

Sin duda suena a grupazo, historias pesadas, jugadores con súper nombres. Citemos: Riquelme, Silva y compañía en Boca. Recoba, Abreu y Scotto en Nacional. Sinha, capaz el jugador de la última década del fútbol mexicano, sin duda el mejor extranjero que llegó, tanto así que fue seleccionado tricolor para Toluca. Barcelona con jugadores de selección como Banguera, Paredes, Erazo y Arroyo fundamentales en la selección de Ecuador además de un Damián Díaz que demostró ser de los mejores volantes ofensivos del continente.

Pero esto es de rendimientos, esto es de fútbol y es lo que menos nos han dado. Partidos aburridos, muchas patadas, pocos pases y jugadas colectivas, arbitrajes que tampoco ayudaron, muy pocos goles, este sin duda, el grupo de la muerte es el peor grupo de la Copa Libertadores.

Nacional es el que algo ha sacado la cara por su garra, porque también es muy pobre en su fútbol, sus figuras, que tienen bastante edad han pasado lesionados y no han regalado su magia. Boca Júniors, en el medio de la novela Riquelme y la vuelta de Bianchi ha sido un equipo sin identidad, en plena etapa de formación, casi irrespetando su historia, es un equipo que no impone condiciones. Toluca jugando mal en copa y en el campeonato ratifica que está en un mal momento, no presiona a sus rivales pero tampoco deja jugar. Barcelona en el peor arranque de campeonato en casi una década, una victoria en 10 partidos en esta temporada, rendimiento bajo en lo individual casi sin gozar de colectivo.

La crítica hoy no es para un equipo en específico, sino a grandes del continente, todos mal, todos jugado con el nombre y no con los pies, este grupo levantó expectativa a nivel mundial y nos ha dado una rotunda decepción. Quedan 2 fechas y media por jugar, 5 partidos por disputarse y es difícil pensar que la historia pueda cambiar. Cualquier equipo que clasifique a octavos de final de este grupo, no será el mejor del grupo, sino el «menos malo»; los que salgan adelante del grupo ninguno tendrá la «chapa» de favorito como normalmente se las daríamos.

Esto demuestra que los grupos de la muerte, no sólo dan partidos en los que se jugará a vida o muerte, sino también partidos muertos y esto es porque todos estos grandes tienen un marcado mal momento. La decepción de esta Copa Libertadores.