Ronaldo Nazario es único e irrepetible. Es considerado por muchos el mejor delantero de toda la historia y eso que tuvo una grave lesión de rodilla que condicionó su rendimiento muchos años, pero con su sobrada calidad continuó siendo letal para los rivales.
Su carrera arrancó muy pronto, siendo un adolescente en Brasil, explotando ya su mote de ‘O Fenomeno’ vistiendo la camiseta del Cruzeiro antes de dar el sato a Europa. Una época que no fue sencilla, pues no era tan habitual que alguien tan joven destacara, y los veteranos se lo hicieron saber.
“Esta anécdota es increible. Cosas de jóvenes, iba muy confiado y dije una entrevista el miércoles que en el partido del domingo marcaría tres goles”, arrancó explicando Ronaldo en una entrevista con Juan Sebastián Verón, sin saber que sería ese un error del que rápidamente se dio cuenta.
“Ni me acordaba. Llegamos al partido, minuto 2, el balón lo tiene mi defensa, yo miraba para allí y viene uno por detrás y me mete un puñetazo. Me caigo, no sabía ni de donde venía. Me levanto ya con sangre, preguntando que pasaba, y me dice ‘aquí no vas a marcar tres goles en tu puta vida, cabrón”, confesó Ronaldo.
Ese fue el inicio de un verdadero infierno. “Ostras, que ostión, no es para tanto. Pasados 10 minutos, el árbitro no había visto nada, viene el tío y otra vez, casi me rompe otro diente. Y faltando 5 minutos de la media parte me mete otro puñetazo sin que me enterara de nada. De verdad que no había muchas cámaras y no se vio de ningún lado, pero tenía la boca rota. Cortes por todos los lados, tres puñetazos así sin ver…”, explicó entre risas a Verón.
Pero como los verdaderos cracks, supo darle la vuelta a la situación a pesar de su juventud. “Salí llorando del campo. 16 años, totalmente sin experiencia. Y nada, me tranquilizaron y volví a la segunda parte mirando donde estaba el cabrón este, no el balón. Al final ganamos el partido 3-0 y marque los tres goles”, acabó relatando Ronaldo, que era absolutamente imparable ya a esa edad.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO