El mexicano Rafa Márquez fue uno de los ilustres que participó en el Clásico de leyendas del pasado domingo en Toluca y a la conclusión del partido agradeció el apoyo que recibió de sus compatriotas. El impacto del fichaje de Márquez por el Barça en 2003 procedente del Mónaco fue todo un acontecimiento en México y desde aquel entonces se generó un mayor sentimiento azulgrana en el país centroamericano que quedó patente en el duelo de veteranos contra el Real Madrid.
"Ha respondido muy bien la gente, creo que se va satisfecha por el espectáculo y ojalá puedan venir más. Sí, por mi culpa mucha gente se cambió del Real Madrid al Barcelona, pero es lo que hay y agradezco el cariño que nos brindaron a mí y a todos mis compañeros", dijo Rafa Márquez, que jugó siete años como azulgrana (2003-2010) y también estuvo dos temporadas al frente del banquillo del Barça Atlètic.
"Disfrutar de este partido, son partidos distintos, jugar contra el Madrid y sobre todo estar enfrente de mi gente, en mi país, que puedan disfrutar lo que pude alguna vez disfrutar con mis compañeros, en esta cancha. Es la pasión, esto nunca se olvida, esto se hace con mucho gusto y más en un club que fue especial para mí", añadió Márquez, feliz de poder representar al Barça en su país.
Tras finalizar su etapa como técnico del Barça Atlètic el pasado verano, Rafa Márquez se incorporó al staff de Javier Aguirre en la selección mexicana pero sigue muy pendiente de la actualidad culé, especialmente de los jóvenes a los que tuvo a sus órdenes en el filial y que ahora están despuntando en el primer equipo.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO