La nueva derrota (2-1) cosechada este domingo por el Everton ante el West Ham United -y ya van siete en 11 partidos desde la llegada de Frank Lampard al banquillo 'toffee'- hace que el partido que los de Merseyside disputarán el próximo miércoles en el Turf Moor de Burnley (20.30 horas) sea una auténtica final por la salvación.
Los de azul marchan decimoséptimos con 25 puntos, solo tres por encima del Watford y cuatro por encima de los 'clarets', que de llevarse el duelo directo del miércoles se quedarían a solo un punto del Everton, un equipo construido a base de talonario para optar a puestos europeos que, a falta de diez jornadas para el final del campeonato, asoma al abismo de la Championship.
Sigurdsson, casi 50 millones de euros
Y es que el coste total de la plantilla 'toffee' es de 380,15 millones de euros, con el islandés Gylfi Sigurdsson como fichaje más caro (49,4 millones de euros) y hasta 12 jugadores por encima de los 20 'kilos': Doucouré (22 millones de euros), Cenk Tosun (22,5), Mykolenko (23,5), Allan (23,6), André Gomes (25), Godfrey (27,5), Pickford y Michael Keane (28,5 cada uno), Yerry Mina (30,25), Iwobi (30,4), Richarlison (39,2) y el anteriormente mencionado Sigurdsson.
Solo una clasificación para Europa en siete años
Un dispendio infinitamente superior al de Watford, Burnley y Norwich City, los equipos que ocupan actualmente las tres plazas de descenso, y que únicamente le ha servido al club de Goodison Park para disputar en una ocasión (2017-18) la Europa League en los últimos siete años.
Ismaïla Sarr, por el que el Watford pagó 30 millones de euros en 2019, es el único futbolista de los tres rivales del Everton que supera los 20 millones de inversión, siendo Cornet (15 millones de euros) y Rashica y Tziolis (11 cada uno) las incorporaciones más costosas de Burnley y Norwich, dos recién ascendidos.
Su último descenso, hace 71 años
Ni salió bien el invento de Rafa Benítez, rechazado desde un primer momento por los aficionados por su pasado en el Liverpool y cesado solo seis meses después de su contratación, ni el cambio de técnico y los cuatro fichajes -Patterson, Mykolenko, Van de Beek y Dele Alli- acometidos durante el pasado mercado invernal han logrado enderezar el rumbo de un Everton que jamás ha descendido en la era Premier League (1992-93 en adelante) a Championship, categoría en la que militó por última vez en 1951.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO