La integración de Antoine Griezmann en el ecosistema Barça ya no sólo se circunscribe al numeroso grupo de franceses que copan el vestuario del Camp Nou. Si en sus primeras semanas, la presencia de Samuel Umtiti , Ousmane Dembélé, Clement Lenglet y Jean Clair Todibo fueron su zona de confort y la pista de aterrizaje a una nueva realidad profesional, en las últimas semanas se observan gestos que indican una creciente relación con la parte del equipo con la que más convivirá en el campo, esa delantera con potencial aún inexplorado junto a Leo Messi y Luis Suárez. El más reciente detalle de esa incipiente relación es el brindis que sirvió para festejar durante el vuelo de París a Barcelona el sexto Balón de Oro de Messi.
Se diría incluso que, hoy por hoy, ya van por delante las relaciones sociales entre el tridente que las futboleras. Teóricamente, la química que debe haber sobre el césped está muy por encima de lo visto hasta ahora. Luis Suárez y Leo Messi, que empezaron más tarde la temporada tras tomar parte en la Copa América, sufrieron lesiones que ralentizaron ese proceso de cuajo del nuevo tridente, hasta el punto que la sensación de novedad al ver coincidir sobre el campo al argentino, al uruguayo y al francés aún se siente. Sin embargo, últimamente ya afloran incipientes señales de comunión. En Eibar marcaron los tres y ante el Borussia Dortmund también. En ese partido se vio el empeño de Messi porque Griezmann marcara, objetivo finalmente conseguido.
En cuanto a la relación humana se han dado pasos inequívocos. A principios de octubre, en rueda de prensa, Griezmann aseguró que tanto Messi como él eran “de hablar poco”, pero que ya habían tomado “algún mate” para estrechar relaciones. Esa terapia del mate ya está dando sus frutos, implicando también a las respectivas familias. Erika Choperena, esposa de Griezmann, publicó este miércoles en sus redes sociales la foto de unos buñuelos de banana, identificando a los asistentes al ágape: Antoine, Luis Suárez, Sofía Balbi, Lionel Messi y Antonela Roccuzzo.
En la celebración del 30 cumpleaños de Sofía, pareja de Luis Suárez, también pudieron compartir momentos junto a otros futbolistas como Jordi Alba, Sergio Busquets y Cesc Fàbregas. Hay espíritu navideño. Y también el del inminente Clásico.