Arséne Wenger rompió su silencio en torno a su marcha del Arsenal en la rueda de prensa previa al partido de semifinales de Europa League ante el Atlético de Madrid. El técnico francés sorprendió a todos al revelar que fue despedido, al contrario de lo que parecía que era un adiós propio.
“El momento de dejar el Arsenal no fue mi decisión. El resto ya he hablado de ello”, dijo Wenger, confirmando de esta manera que Ivan Gazidis, jefe ejecutivo del club, lo forzó a abandonar el club 12 meses antes de lo que quería el francés, cuando finalizaba su contrato. Casualmente, todo ocurrió cuando los ‘gunners’ preparaban su partido de Europa League, en un buen momento europeo del club.
Wenger, en esta tesitura, querrá terminar su etapa en el Arsenal de la mejor forma posible y eso no quiere decir otra cosa que levantar un título europeo, aunque el reto sea mayúsculo. “¿Hay un adiós perfecto? No lo sé. Solo quiero hacerlo lo mejor posible. Este equipo es de calidad. He visto a estos hombres desafiados mentalmente y siempre responden de la manera correcta. El grupo se merece algo especial. Quiero hacerlo por ellos”.
Eso sí, antes de marcharse, defendió sus últimas temporadas: “Hace dos años terminamos segundos en liga, el año pasado hicimos 75 puntos y ganamos la FA Cup y Community Shield. Este año hemos llegado a la final de la Copa de la Liga y estamos en semifinales de la Europa League. Los jugadores tienen calidad y estoy convencido que, con dos o tres incorporaciones, este equipo podrá luchar por el campeonato”.