Marcus Rashford quiere jugar en el FC Barcelona la próxima temporada y no está perdiendo el tiempo. El delantero inglés de 27 años ha dado un paso estratégico en los últimos días al poner su futuro en manos de Pini Zahavi, un agente con mucho peso en el entorno azulgrana y que ya ha sido clave en otras operaciones recientes del club.
Con el futuro de Ansu Fati en el aire —y sin convencer a Hansi Flick durante esta campaña— el Barça tiene una vacante evidente en la banda izquierda, y Rashford ve allí su oportunidad.
Zahavi, la llave azulgrana
Zahavi no solo es el representante de Robert Lewandowski y del propio Flick, sino que mantiene una relación directa y fluida con Joan Laporta. Hace apenas unos días fue visto saliendo del restaurante Botafumeiro de Barcelona, habitual punto de encuentro de negociaciones clave.
Fuentes cercanas a Rashford aseguran que el jugador tiene claro que el Barça es su prioridad absoluta, y confía en que Zahavi pueda abrirle la puerta. De hecho, el club catalán ya valoró su incorporación en el pasado mercado de invierno, tras ser ofrecido por un intermediario de confianza.
¿Cesión a la vista?
Con contrato en el Manchester United hasta 2028, Rashford aceptaría una cesión y rebajarse el sueldo con tal de aterrizar en el Camp Nou. Actualmente cedido al Aston Villa, el inglés no entra en los planes del técnico Rubén Amorim para la próxima campaña, por lo que se busca una salida. El Barça sería su destino ideal.
Aunque desde la entidad catalana no quieren hablar de mercado por ahora, las conversaciones ya han empezado en fase inicial, y todo apunta a que este será uno de los nombres que más sonarán este verano.