Antoine Griezmann fue titular el domingo en el empate entre Francia Canadá en Burdeos, último amistoso de preparación del combinado bleu antes de su estreno en la Eurocopa de Alemania, el lunes 17 de junio ante Austria.

Didier Deschamps no reservó al futbolista del Atlético de Madrid, al que mantuvo 87 minutos sobre el terreno de juego. El seleccionador alineó al rojiblanco en la mediapunta, con total libertad de movimientos, por detrás de Giroud, que comprobó la generosidad de Griezmann. No sólo en el campo, sino fuera. Porque con Mabppé suplente, el de Macon debía ser el encargado de portar el brazalete de capitán, pero decidió cedérselo al delantero, que jugaba su último partido con Francia en territorio galo.

Ya en lo meramente futbolístico, no fue la mejor actuación de Griezmann, en la línea de todo el equipo. Aunque generó un par de buenas ocasiones en la primera mitad, no fue el jugador total de otras veces, algo que acabó acusando la selección bleu.

A pesar de tratarse de un amistoso, Deschamps no quiso renunciar a él, manteniéndolo en el césped durante 87 minutos en busca de un gol que dejara el triunfo en casa en lo que fue la última prueba del seleccionador antes de debutar en la Eurocopa.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO