El partido de ida de los cuartos de final de la Copa de Campeones de la Concacaf en el Chase Stadium entre el Inter Miami y los Rayados de Monterrey terminó caliente por una reacción de Leo Messi, quien no tuvo participación en el juego.

Tras el silbatazo final y luego de consumar la derrota el equipo de la MLS, el delantero argentino fue a reclamarle al árbitro Walter López por la doble amonestación hacia David Ruiz que provocó que el equipo local jugara más de 20 minutos con 10 hombres.

El reclamo de Messi no fue solo para el silbante, ya que el argentino también se encaró con Fernando ‘Tano’ Ortiz, estratega de Monterrey, por las palabras que el DT dijo previo al duelo en donde aseguró que el arbitraje influye a favor del campeón del mundo.

Nico Sánchez, auxiliar del Tano Ortiz, así como parte de la directiva rayada tuvo que intervenir, ya que por parte del Inter Miami, Luis Suárez también se metió en los reclamos, lo mismo que el Tata Martino.

Los Rayados de Monterrey pedirían a la Concacaf investigue este hecho, ya que Messi, al no estar como jugador elegible para este encuentro tendría ‘prohibido’ acceder a estas zonas donde encaró al silbante y al Tano.