El Barça, con su presidente a la cabeza, quiere que Xavi Hernández siga en su cargo, dando marcha atrás en su decisión de irse, anunciada el pasado 27 de enero tras la dolorosa derrota en casa contra el Villarreal (3-5). Sin embargo, por ahora todo sigue igual. Es decir, que el técnico no se ha movido de su postura.

Ha dado esperanzas a la cúpula directiva la coletilla “a día de hoy” que Xavi ha empleado para reiterar que no ha cambiado en su idea. No obstante, los que le conocen aseguran que la decisión es firme salvo que haya situaciones excepcionales que puedan provocar en Xavi dudas trascendentales.

Acabar muy bien para poder dudar

Eso pasa por ganar la Champions y/o la Liga o, al menos, por competir hasta el final por ambos títulos. Ahí podría darse una situación en que, por aclamación o por ilusión, el técnico podría meditar un cambio de parecer y que su familia lo viese bien. Pero aún así faltarían condiciones que cumplirse, básicamente referidas a la capacidad económica del club para reforzarse.

El ‘fair play’ salarial, clave

Y es que Xavi no quiere pasar otro verano como el anterior, con operaciones cerradas en el último momento por culpa de la ausencia de ‘fair play’ salarial. Si no hay garantías de que hay dinero para hacer una gran plantilla no habrá ninguna opción, por bien que acabe la temporada. Xavi siempre ha deseado poder competir por todo, pero no dependiendo de chavales de 16, 17 o 18 años por buenos que sean.

Necesitaría fichajes ‘top’

Para que siguiese haría falta que le garantizasen que hay medios para fichar jugadores imprescindibles para él. Por ejemplo, un mediocentro y un interior top. Es decir, un Zubimendi o un Kimmich, a los que ya pidió el pasado verano tras la marcha de Busquets, y un Bernardo Silva. Este año Kimmich está más a tiro, a un año de acabar contrato y con serias dudas de si continuar en el Bayern, y Bernardo renovó con el City hasta 2026 pero se puso una cláusula de salida ‘pro Barça’ de 50 millones de libras. Pero para ficharlos hace falta dinero, sin que llegue de debilitar la plantilla con ventas, claro está.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO