Ya se conoce la sanción a Paul Pogba. La Fiscalía Antidopaje le impuso cuatro años de inhabilitación como castigo por el positivo por testosterona que dio el pasado 20 de agosto en el duelo entre la Juventus y el Udinese en la Serie A.
El medio francés de 31 años, que no disputó ningún minuto de aquel encuentro en el Friuli y que apenas ha jugado dos partidos (52′) esta temporada, estaba sancionado de forma provisional desde que se conoció la noticia. Pogba solicitó un contra análisis en septiembre que en octubre confirmó su positivo y, desde entonces, estaba a la espera de que se dictaminara un castigo que puede poner punto y final a su carrera.
Su próximo paso será apelar ante el TAS de Lausana o ante el Tribunal Nacional Antidopaje de Apelación (CNA). Sin embargo, el golpe es tremendo para un futbolista cuya línea defensiva se basó en el concepto de “no intencionalidad” a violar las normas antidopaje y en el “desconocimiento” de las características prohibidas del producto tomado (Dehidroepiandrosterona (Dhea). Sin embargo, la Fiscalía Antidopaje no lo ha considerado así y le ha impuesto una dura sanción.
Campeón del mundo con Francia en Rusia 2018, Pogba fue uno de los mayores talentos de la última década. El Real Madrid tanteó en varias ocasiones el fichaje de un centrocampista que iba para Balón de Oro.
Sin embargo, sus viajes de ida y vuelta entre el Manchester United y la Juventus (los ‘red devils’ pagaron por él ¡105 millones de euros! en 2016 convirtiéndole entonces en el traspaso más caro de la historia) fueron la sintonía de la trayectoria de un medio con una calidad y un físico imponentes pero con enorme irregularidad.
Pogba, que volvió a Turín en 2022, tiene contrato con la Juve hasta 2026. La sanción por dopaje va más allá de esta fecha. Veremos cuál es la decisión que toman los ‘bianconeri’, aunque la rescisión del contrato parece el escenario más posible. Por el régimen interno juventino no puede entrar a las instalaciones del club en Continassa y tiene un salario mínimo de 2.000 euros al mes según informó la ‘Gazzetta’.
Su regreso a Italia y a la Juve fue fatídico: 12 partidos (poco más de 200 minutos en total), 54 encuentros perdidos por lesión… y un positivo por testosterona que le ha costado cuatro años de inhabilitación al jugador con el segundo salario más alto de la Serie A (8 millones de euros netos por temporada más bonus) tras Osimhen (Nápoles), que cobra 10. No jugó el Mundial de Qatar en el que Francia fue subcampeón y ahora se enfrenta al ocaso de su carrera.
FUENTE: MARCA.