Si la primera parte había sido horrible para el Real Madrid, con 2 goles del Almería en dos fallos de los merengues, tocaba darle la vuelta al resultado tras el descanso.

Ancelotti reaccionó introduciendo un triple cambio a la vuelta de vestuarios, y el equipo lo notó con mucha más energía y creyéndose que se le podía dar la vuelta al marcador.

Y si primero fue Bellingham quien anotó, esta vez fue Vinicius quien tenía claro que no se podía ir de este partido sin anotar un gol, además el del empate en un momento importante.

Vio volar el balón dentro del área y se fue con todo al remata. Sabía que se tenía que dejar el alma, pero el Bernabéu le empujó para no dejar pasar una ocasión como esta.

Anotó el gol, y aunque el colegiado lo anuló, el VAR tuvo que entrar una vez más para enmendar el error y subir el tanto del empate la luminoso.