Hace un par de semanas, Boca soñaba con ganar la Libertadores. Provocaba una revolución popular histórica en Río de Janeiro, pero se frustraba porque perdía la final contra Fluminense. Ahora no solo sigue lamentando esa derrota que le impidió atrapar “La Séptima”. También está a un paso de quedarse afuera de la edición del año que viene. Todo porque volvió a tropezar con la pelota y resultó eliminado en semifinales de la Copa Argentina. El que disfrutó en el estadio Mario Kempes de Córdoba fue Estudiantes.
Más allá de los méritos del rival, Boca regaló la semifinal. Así de simple. Obsequió espacios y lo sorprendieron rápido. A los 3 minutos, ya perdía por un golazo de cabeza de Guido Carrillo. Y encima, a los 13 quedó con un hombre menos por un golpe irresponsable de Marcelo Saracchi.
Después, jugando con 10 futbolistas, Boca lo dio vuelta con dos resoluciones de Miguel Merentiel y viajó al descanso en ventaja. Pero la despilfarró en el mismo inicio del segundo tiempo. Lo empató Mauro Boselli. Y poco tiempo después, Jorge Figal convirtió un gol en contra y Estudiantes sacó la diferencia que supo sostener hasta el final.
Boca viene pagando un precio demasiado alto por las expulsiones innecesarias. Le pasó con Marcos Rojo ante Palmeiras, con Frank Fabra en la final con Fluminense y anoche con Saracchi frente a Estudiantes. Demasiadas ventajas viene otorgando. Por otro lado, en la noche de Córdoba, el entrenador interino Mariano Herrón careció de reflejos con los cambios para darle más solidez del medio hacia atrás una vez que su equipo pasó a ganar con un hombre menos. Y además faltaron más individualidades en nivel elevado. Siempre a Boca venían rescatándolo Sergio Romero, Luis Advíncula, Valentín Barco y Merentiel.
Boca soñaba con ganar la Copa Argentina para clasificarse a la Libertadores 2024, pero se quedó afuera en semifinales y necesita un milagro para ingresar por la tabla anual del fútbol doméstico. Estudiantes le dio un mazazo y está en la final. Hoy se conocerá su rival porque se jugará la otra semi: San Lorenzo – Defensa y Justicia.
Mientras tanto, Boca también se prepara para renovar sus autoridades con una pulseada entre titanes: de un lado, Juan Román Riquelme como presidente; desde la oposición, Mauricio Macri como vice. Ese duelo político será el 2 de diciembre. Ahí ya se sabrá si los xeneizes el año que viene juegan la Libertadores o la miran por televisión.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO
