Rafael Leao fue el gran protagonista de la remontada del Milan ante el PSG (2-1) con un gol de chilena que significó el momentáneo empate a uno, redondeado después con el segundo tanto de Giroud. No fue sólo el gol. Firmó una gran actuación, fue elegido MVP y revitalizó las opciones de un equipo italiano que de haber perdido se hubiera quedado con pie y medio fuera de los octavos de final.

El delantero celebró el tanto llevándose el dedo a la boca, pidiendo silencio con ese gesto. Y es que el portugués ha recibido muchas críticas. Tras el encuentro, afirmó que «la crítica me empuja. Tú sigues hablando y yo hablo en el campo».

El modelo Mbappé

Enfrente tuvo al Kylian Mbappé, a al que acabó robándole el protagonismos. Leao tuvo palabras para él. «Es un campeón, es un modelo para mí. Pero intento ser Rafa«, comentó finalmente.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO