Otra despedida legendaria, otra jornada emotiva para el barcelonismo. Esta vez, en el Auditori 1899 del Camp Nou, para despedir a Jordi Alba después de 18 años como azulgrana, siete de cantera y once de primer equipo. “Me voy feliz y con la cabeza muy alta. Por todo lo conseguido”. Y se dirigió a los suyos: “Orgulloso de la familia que tengo y la gente que me quiere. He luchado por ellos durante estos años”, apuntó el defensa del FC Barcelona.
En un acto con una mezcla medida entre la emoción y el sentido del humor, conducido por el actor José Corbacho, el lateral empezó emocionado, con un sentido discurso de agradecimiento. Pero posteriormente se soltó y fue el genio y figura que tanto ha calado en el vestuario azulgrana.
“Agradecer a la afición, que me regalasteis el momento más emocionante de mi carrera”. Las primeras de Jordi Alba lágrimas fueron cuando habló de sus padres, su orgullo y a quién agradeció los valores que le inculcaron; también para su hermano David, recordando sus partidos en la plaza, y se acordó de sus abuelos, especialmente de su abuelo Paco, que no lo pudo ver jugar en Primera. Alba tuvo que parar varias veces durante su discurso, también cuando habló de sus agentes, en concreto de Vicente Forés hijo. Y sin duda, en el momento final su parlamento. “Gracias a mis hijos y la fuerza que me habéis dado en los momentos más delicados. Sois lo mejor de mi vida. Y a mi mujer, Romarey, un pilar para mí. A tu lado todo es más fácil, muchas gracias”.
Familiares y amigos empezaron conmovidos, incluso el presidente Laporta no pudo contener las lágrimas. Pero el acto dio un giro a partir de entonces y Jordi, que admitió haber sido en momentos “un poco vinagre”, mostró su cara más íntima y natural para ver los videos de sus amigos y compañeros.
El primero fue el del cantante Antonio Orozco, de gira en Argentina, que llamó desde Córdoba. Un buen amigo de su ciudad: “Estamos muy orgullosos todos los de L’Hospitalet. Por lo que representas, eres un ejemplo”.
Y después llegó el turno de la plantilla. “Os echaré de menos”, les dijó Alba. A todos “menos a las carreras de Edu Pons”. Tuvo mensajes de toda la plantilla y de sus ex compañeros. Destacaron su zurda, fue considerado el mejor en su posición y resaltaron su ayuda a los jóvenes y su capacidad de crear buen ambiente.
También salieron a la tarima su hermano David, explicando anécdotas de su infancia, y Gerard Piqué. “Tenemos una relación especial. Hemos vivido buenos momentos y también malos. Han sido momentos muy especiales, como Jordi y yo sabemos”. Y comparó las bromas que se hacían en el vestuario tanto con él como con Sergio Busquets. “Busi se las guardaba y con Jordi se acababa rápido”. También subió su pareja, Romarey, que se encargó de destacar estos últimos días vividos y todo el cariño que recibieron de la afición blaugrana”.
Tras unas palabras de los capitanes, Alba recibió el afecto de sus compañeros. Tuvo mensajes de Villa, Arturo Vidal, Cesc, Pedro, Puyol, Bartra, Thiago, Aleñá, Luis Suárez… y Leo Messi, entre otros. El defensa habló de su relación con el argentino, que le envió uno de los videos. “Me quedo con las palabras de cariño de mis compañeros”.
Xavi y Laporta fueron los encargados de cerrar el homenaje. Un ejercicio de reconciliación pública después de haberlo hecho en privado.
TEXTO TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO