Este viernes la prensa inglesa nos ha sorprendido con la noticia de la existencia de cierta inquietud en el vestuario del Chelsea en dos frentes diferentes. Por un lado, algunos jugadores no están nada convencidos del rendimiento de los nuevos fichajes. Por otro, los ingleses de equipo temen no ver renovados sus contratos.

Según ‘The Athletic’, la llegada este pasado mes de enero de futbolistas de la talla de Joao Felix o Benoit Badiashile sí están respondiendo a las expectativas. Pero se pone en duda la adaptación del ucraniano Mudryk. Algunos compañeros opinan que lo que costó no se está reflejando en el terreno de juego.

Otra de las inquietudes que asola al vestuario blue es que una parte del contingente inglés del equipo está preocupada por la situación de sus contratos. Temen que las ampliaciones no lleguen a buen puerto. Es el caso, por ejemplo, de Mason Mount, pero también de Loftus-Cheek. Por el momento no hay acuerdo para que sigan e intuyen que se les pueda echar este verano.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO