El pasado jueves 29 de diciembre murió Pelé y muchas personas decidieron ir a Brasil para despedirse del máximo ídolo del futbol. La leyenda brasileña tuvo un velorio público de 24 horas en el estadio del Santos, equipo donde forjó buena parte de su gran carrera.
Miles de personas se dieron cita para despedirse de Pelé en el estadio del Vila Belmiro e incluso Gianni Infantino, presidente de la FIFA, se trasladó hasta Brasil. Sin embargo, también hubo ausencias y una de ellas fue la de Neymar, quien es una de las máximas estrellas de la Selección de Brasil en estos tiempos. Además, Ney también se forjó en la cantera del Santos.
Neymar no pudo viajar a Brasil para despedir a Pelé, quien siempre le brindó su apoyo en su carrera, por lo que mandó a su padre como representante, un hecho que no cayó nada bien en Brasil.
¿Por qué Neymar no asistió al funeral de Pelé?
Un reporte de TNT Brasil señaló que la ausencia de Neymar en el funeral de Pelé fue porque el PSG no quiso liberarlo. Sin embargo, otros medios brasileños señalan que el jugador vio inoportuno viajar.
Por otra parte, el diario Le Parisien apuntó: " el club parisino cuenta con su jugador (Neymar) para los próximos plazos, mientras que el calendario para el inicio del año 2023 se presenta especialmente ocupado. Un viaje exprés a Brasil a estas alturas de la temporada no hubiera sido adecuado dada la seguidilla de partidos que le espera al PSG en enero".
Pelé ya descansa en paz
Pelé ya descansa en paz. El astro brasileño dio este martes su último paseo por las calles de Santos, en medio de la fiesta de una multitud que cantó y lloró hasta la sepultura de su mayor ídolo.
Miles de personas quisieron despedirse del Rey, para muchos, mejor futbolista de todos los tiempos, el único que ha conquistado tres mundiales: Edson Arantes do Nascimento 'Pelé'.
Las puertas de Vila Belmiro se cerraron al público. Cerraba así la capilla ardiente de un día sobre el césped del estadio del Santos, a la que acudieron 230 mil personas tras aguantar una fila, por momentos, kilométrica.
En el centro del campo, sobre una carpa, el féretro abierto de Pelé, rodeado de familiares, amigos y autoridades que han pasado a cuentagotas por la cancha santista.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, acudió el lunes y este martes lo hizo el jefe de Estado de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, dos días después de asumir la Presidencia y acompañado de la primera dama, Rosangela da Silva.
Finalizada la misa, ocho cadetes de la Policía Militar de Sao Paulo, vestidos de forma impoluta, cargaron el ataúd de color negro con detalles plateados a los hombros. De fondo, un toque fúnebre de corneta y el sonido de algunos helicópteros.
En las gradas ondeaban pancartas gigantes enalteciendo al antiguo delantero, mientras los uniformados llevaban sus restos mortales hasta la parte superior de un camión de bomberos para iniciar el cortejo por Santos.
A la salida de Vila Belmiro, la solemnidad desapareció. En ese punto esperaban decenas de hinchas en efervescencia, equipados con tambores y unas gargantas afinadas.
TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO