Por suerte no se tuvo que lamentar algo más grave, pero si hubo momentos de incertidumbre durante el transcurso del Arsenal-Liverpool.

Fue Gabriel Jesus el que dio el susto al caer desplomado en el minuto 57 de partido. El brasileño se llevó un golpe en la cara y cayó noqueado, encendiendo todas las alarmas.

Firmino, rival hoy pero compañero de Jesus en la selección brasileña, pidió con gestos la entrada presta de las asistencias.

Sin querer, Tsimikas propinó un codazo en la cara a Gabriel Jesus, que cayó redondo y quedó aturdido por unos breves instantes. Por fortuna el incidente no fue a más y el brasileño pudo continuar jugando con total normalidad.

TOMADO DE MUNDO DEPORTIVO